viernes, 27 de agosto de 2010

Un día así.

Un día así.

Las veredas se llenaron de ese color y ese aroma de los manzanos, no había testimonio más contundente de la llegada de la primavera. Desde una vereda a la otra de enfrente la imagen emulaba una pintura entre clásica y surrealista, los colores parecían estar definidos y un instante después parecían atacados por la implacable pincelada difusa de un pintor que busca el toque de su estilo pretendiendo que la imagen tenga esa apariencia de estar viendo con los ojos a medio cerrar y a medio abrir.
El piso comenzaba a colmarse de las delicadas flores, que pisoteadas, teñían de un color también difuso las lajas y el cemento. La brisa cómplice de la natural manera de reproducirse de los manzanos provocaba un polvillo tenue pero persistente que entraba por los ojos, por la nariz, por la boca…
A esa hora de la tarde poca gente transita las veredas del barrio, pero aún hay algunos que salen a ver el espectáculo florido de los manzanos e incluso hay quienes aún toman fotografías y quienes se empeñan en barrer las veredas colmadas de flores y de restos, de polen y semillas.
Se me ocurrió pensar, que yo había nacido en primavera, apenas unos días después de comenzada, se me ocurrió, y nunca supe el motivo, que mucha gente hace un balance de su vida cuando llega fin de año, como si diciembre fuera además de una fecha calendario, una buena excusa para cerrar los ejercicios, los balances, los inventarios. Antes la gente hacía más balances, antes la gente buscaba hurgar un poco más en sus fallas, en sus errores y aciertos y buscaba la manera de corregirlos, los balances se hacen para obtener un resultado y medir ese resultado con las expectativas y saber si llegamos, si superamos o no alcanzamos la meta que nos habíamos propuesto.
Ahora la gente parece no tener tiempo ni para esto, ya no hay muchos que se quieran enfrentar a la realidad porque nos hemos construido una realidad que casi siempre nos asalta con la sensación de no ser aquella que deseamos, y nos hundimos cada vez más en esta danza interminable y reciclable, rotativa y ondulante. Ahora uno espera llegar a fin de año solo para terminar el año tal vez con la esperanza de que el próximo sea mejor, o menos peor, tal vez pensando en un descanso veraniego, tal vez pensando: -al fin! He llegado…
Pero algunos siguen haciendo balances y yo lo hago, pero ese día, en un día así, lleno de flores de manzano y de aromas y colores, con veredas manchadas y brisas frescas, con un sol interminable, podría ser el mejor día para hacer el balance y terminar y empezar en primavera, sin esperar hasta fin de año. No supongo mejor clima que este para cerrar y empezar la nueva cuenta, sin el atavío apremiante del calor del verano, la húmeda promesa de una tormenta cercana, sin la inercia inevitable de las corridas festivas y los preparativos y los saludos, y los regalos…
Después de todo, todo renace en primavera, es un registro simbólico de la vida, luego del frío gris del invierno, antes de la pesadumbre agobiante del verano.
Y sin más trámite que mi convicción casi inmediata me hice a la idea de que era le momento mejor, la oportunidad más oportuna, la gracia más graciosa, el momento más imparcial, para recordar lo sucedido en ese año, para buscar el resultado que me indique si había logrado vivir, aunque más no sea parecido a lo que hubiese deseado. Y así lo hice y no me importó el resultado, sino haberme sentido capaz de buscarlo.
Y pasó un año, y otro, y otro más, y siempre en primavera, me fui como surcando por un estrecho, la costa a ambos lados, y al frente horizonte, cielo y agua, como un viaje imaginario hacia un lugar que no existe en una nave solitaria pero repleta de objetos, desbordante de emociones y de esa sensación indescriptible de miedo y entusiasmo.
Entonces me di cuenta que siempre en primavera sucedía algo, algo distinto, algo que marcaba y dejaba huella por algún costado, y pensé: ¿No será que yo mismo he provocado esto con mi capricho de hacer balance en primavera?
Tras ella, mil preguntas más sin respuesta, y mil respuestas que no hallaban la pregunta y sin darme cuenta siquiera me vi envuelto en mi propia duda, y en mi propia convicción y en mi propia desmesura.
El recuerdo de los manzanos y su aroma, sus flores y las veredas, me han asaltado la memoria desde aquel día. He buscado ese perfume, he bregado por encontrar la justa imagen de esa escultura que vivía, y le he hallado casi siempre, aunque a veces, la he hallado vacía. Y me sigo preguntando si mi balance en primavera me satisface por el resultado o me incentiva por el clima, si hago bien o hago mal en perderme por un día y encontrarme sin remedio con la coherente idea de mi incoherencia relativa…
Y cada año, cuando llega primavera, me renace como un retoño caprichoso por hallar lugar en donde mostrar su vida, y cada año en primavera me olvido del invierno y me refugio en las brisas y en la neblina, y me pierdo, y me encuentro, y me voy a veces sin haber vuelto, y vuelvo como si nunca me hubiese ido, y al final, rendido ante la verdad incólume de mi alegría y mi desdicha, me aferro a la híbrida porfía de los sueños incumplidos, y me consuelo magramente con excusas y con ira, y me sosiego mansamente con razones y mentiras…

Miguel Ángel Turco

martes, 24 de agosto de 2010

Cuentos realizados por alumnos de 3º grado escuela nº 38

LA ESPADA SALVADORA
HABÍA UNA VEZ, UN MARCIANO QUE ESTABA VIVIENDO EN LA PLAZA; ÉL SE LLAMABA NICOLÁS.
UN DÍA A LA CIUDAD DE NEW YORK LLEGÓ UN CAZADOR QUE QUERÍA MATAR A LOS MARCIANOS, NICOLÁS SE QUISO ESCONDER PARA QUE EL CAZADOR NO LO DETECTE CON SU GPS DE MARCIANOS. CADA DÍA LA POBLACIÓN DE MARCIANOS DESCENDÍA. UNA TARDE LLEGÓ UN ASTRONAUTA, EL VINO A SALVAR A SUS AMIGOS, LOS MARCIANOS, VINO CON UNA ESPADA Y LLAMÓ A NICOLÁS, ELLOS FUERON A LA CASA DEL CAZADOR, SILENCIOSAMENTE ENTRARON Y CON LA ESPADA LO MATARON. LOS MARCIANOS VIVIERON FELICES.

AUTOR: MIGUEL GRIGERA
3º GRADO ESCUELA NORMAL Nº 38 “DOMINGO F SARMIENTO” VILLA CAÑÁS










LA VARITA Y EL MAGO
HABÍA UNA VEZ, UN DINOSAURIO LLAMADO MAURO QUE VIVÍA EN UN GRAN CASTILLO.
UN DÍA RECIBIÓ UNA CARTA QUE DECÍA:
“DEBES SALVAR AL MUNDO DE LOS DINOSAURIOS”
ENTONCES EL DINOSAURIO DECIDIÓ EMPRENDER EL VIAJE HACIA EL LUGAR DONDE TENÍAN PRISIONEROS A SUS AMIGOS.
DURANTE ESE VIAJE TUVO QUE ENFRENTAR VARIOS DESAFÍOS.
CUANDO LLEGÓ AL MUNDO DE LOS DINOSAURIOS LO ENCONTRÓ RODEADO DE DRAGONES GIGANTES ENFURECIDOS Y MUY MALOS.
EN ESE MOMENTO SE ENCONTRÓ CON SU AMIGO EL MAGO QUE LE OFRECIÓ AYUDA CON SU VARITA MÁGICA.
FINALMENTE VENCIERON A LOS DRAGONES Y EL MAGO CON SU VARITA MÁGICA LOS CONVIRTIÓ EN RATONES Y ASÍ SALVARON AL MUNDO DE LOS DRAGONES Y SOLTARON A LOS DINOSAURIOS.

AUTOR: LEONEL RODRIGUEZ
3º GRADO ESCUELA NORMAL SUPERIOR Nº 38 “DOMINGO F SARMIENTO”






EL SUPERHÉROE Y LA MALVADA BRUJA
HABÍA UNA VEZ UN SUPERHÉROE LLAMADO AGUSTÍN QUE ESTABA HACIENDO SUS RONDAS ESPECIALES PARA VER SI ALGUIEN ESTABA EN PELIGRO. EL VIVÍA EN UNA CUEVA GRANDE Y FRÍA.
UNA NOCHE, MIENTRAS ESTABA CAMINANDO AFUERA DE SU CUEVA APARECIÓ UNA BRUJA MALVADA Y LO METIÓ ADENTRO DE UNA JAULA. ENONCES AGUSTÍN GRITÓ Y PIDIÓ AYUDA.
POR SUERTE APARECIÓ UN ASATRONAUTA LLAMADO FLIK CON UNA ESPADA PODEROSA Y ROMPIÓ LA JAULA, ATRAPARON A LA BRUJA Y VIVIERON FELICES PARA SIEMPRE.

AUTORA: VICTORIA GÓMEZ
3º GRADO ESCUELA NORMAL SUPERIOR Nº 38 “DOMINGO F SARMIENTO”

lunes, 23 de agosto de 2010

Verte

Verte es vencer la inmensa perversidad de ausencia, a la que el universo nos condena.

Verte, oír tu voz, ese susurro cómplice, que me dice que estás, que no te has ido, que no está mal quererse a contramano.

Verte es amanecer en medio de la noche, descubrir las penumbras de la madrugada, con la chispa sagrada de tu sexo y el mío. Arriarme e izarme en tu cuerpo, desatar las pasiones, dejarlas galopar sin riendas, mientras me pierdo en los infinitos horizontes de tu piel amanecida en mi cama.

Verte, tocarte, es derrotar el cansancio del cuerpo, para nacer en tus labios, para parirte en un beso, y regalarnos la vida, en solo un instante.

Verte, es resucitar después de siglos sin vos, vencer inconmensurables planicies de ausencias y distancias. Derrotar la muerte, celebrar la vida.

Verte es poner a volar, todas las mariposas del mundo, en una solemne danza que se pierde en el origen de los tiempos, y renace cada día en el beso de los enamorados.

Verte es la calma, la paz del guerrero, el reposo manso después del fragor de la lucha, es saltar barricadas para llegar a tus brazos. Derrotar el miedo a la orfandad, al desamparo y al abandono, para cobijarme en tu manantial de besos que inundan, desbordan, se derraman.

Verte es olvidar mis miserias, transformar en triunfos todas las derrotas. Dejarme vencer triunfante, bendecir el amor, el encuentro.

Verte es caminar por las cornisas, en equilibrio por el filo de mi alma agitada, de mis venas hinchadas, palpitando furiosas, preñadas de la adrenalina que se gesta en la cercanía de tu cuerpo con el mío. Es saltar al vacío, sin caer, cómo si la gravedad les fuera ajena a los amantes.

Verte es sentir, cómo se eriza la piel en todo el cuerpo, y el calor sonroja las mejillas, y el pulso se acelera, y la sangre se subleva, y el amor llama; no invita, obliga. Es sentir que somos sólo deseo. Animales en celo en una noche insomne, en la que el único camino es recorrer tu cuerpo.

Verte es revivir para volver a morir, y renacer, y morir otra vez, con cada orgasmo, cubriendo tu piel y la mía de las mieles que tu amor inventa para mí.Verte es el amanecer y el ocaso, el sol y las estrellas.

Verte es igual a sin aliento. Naufragar en vos, emparejar mi larga lista de amaneceres impares. Entibiar los inviernos en los umbrales, saciar el hambre, la sed y la congoja.

Verte es desatar tempestades, resistiendo rutinas, cancelando miedos, derrotando el horror de la pequeñez humana.

Verte es detener los relojes, bajarse del mundo, llegar hasta el final del universo en fuga.

Verte es sudar poesía y música.

Verte, tan solo verte, y seguir.

Natalia Jaureguizahar

miércoles, 18 de agosto de 2010

El Camino

Tal vez estoy recorriendo este camino para recordar, que a veces la felicidad está en la búsqueda, más que en el encuentro. En el camino, que me llevó a vivir esta aventura, con mi familia y amigos, en la emoción de los recuerdos que llenaron mi casa y mis días. Las anécdotas que revivieron, mis días de infancia con el abuelo, la niñez de mi vieja y mi tía, los recuerdos de la casa del pueblo, de los días de lucha. El reencuentro con Delfor, y esa gente maravillosa de los pueblos, que te abren su casa y su corazón, simplemente por que una loca nostálgica, se acercó un día a decirles, que un pedacito de tu historia duerme en el patio de la que ahora es su casa. Guillermo, madrugando un sábado para laburar codo a codo conmigo y mi familia, por el solo hecho bendecir la amistad que construimos. Esa amistad que te convierte en hermanos, cuándo la lucha y el sueño es compartido, la hermandad de la militancia, que sólo los que la conocemos comprendemos. Esa hermandad que hace que uno pueda caerse, sabiendo que un compañero va a estar ahí, para sostenerlo, esa, de festejar los triunfos y llorar las derrotas juntos. La que los peronistas conocemos de cerca, porque hemos llorado hermanos caídos, y celebrado las juventudes peronistas que se van sumando al camino, a lo largo de nuestra historia colectiva.Tal vez, esta búsqueda del tesoro, ya ha dado sus frutos, y lo que buscaba, sin saberlo, era a mi familia, y a la amistad, el compañerismo, y esas palabras de aliento, de las personas que me dijeron que no afloje, que siga con esta locura. Los que me acompañaron desde las palabras de ánimo, o se pusieron a averiguar cómo se podía hacer para hallar la famosa caja del abuelo. Los que me desearon suerte, los que rezaron.A lo mejor el tesoro lo encontré, cuándo mi cuadernito militante, empezó a sangrar poesía y anécdotas, desde que mi abuelo volvió, en las palabras de mi tía, a decirme que sigue estando, aunque ya no pueda abrazarme cómo cuándo yo era chica, y él, enorme, inmortal, invencible. Por lo menos, eso creía yo por esos días. Ahora, me parece que me está diciendo que ya estoy grande, que tengo que aprender a caminar sin necesitar tomarlo de la mano todo el tiempo, y que, siempre va a estar marcando mi camino, cómo un designio divino.Debo reconocer que es un privilegio, vivir esta aventura. Cuatro generaciones de una familia, detrás de un legado, de un recuerdo, de las raíces de la historia, nuestra propia historia. Quiero brindar con ustedes por el éxito de esta búsqueda que continúa, celebrar el triunfo de haberme dado cuenta que hay muchas personas maravillosas en mi vida. Quiero brindar por la vida, que me dejó ver que cada día puede traer una búsqueda, y el disfrute, está en el viaje. Y, especialmente, quiero celebrar con ustedes, el reencuentro con mi abuelo, al que fui a buscar en ese primer viaje, sin darme cuenta, que estuvo siempre a mi lado.

Natalia Jaureguizahar

miércoles, 11 de agosto de 2010

Tres cuentos realizados por alumnos de 3º grado. Escuela nº 178 "Villa Cañás"

LUCÍA LA SUEÑERA

ESTA HISTORIA COMIENZA EN LA PANZA DE LA MAMÁ DE LUCÍA, SU PAPÁ TODAS LAS NOCHES APOYABA LA OREJA EN LA PANZA Y MUCHAS VECES SE QUEDABA DORMIDO, SOÑABA CON SU HIJITA Y ASÍ NACIÓ SOÑADORA
HOY EMPIEZA LA ESCUELA, DE DÍA ES UNA NENA NORMAL QUE LE GUSTA BAILAR Y CANTAR, PERO DE NOCHE SUEÑA, SUEÑA Y SUEÑA CON CARNAVALES, SUEÑOS DE AZÚCAR, CON LARGOS TRENES, CON DÍAS LLUVIOSOS Y SOLEADOS Y SUEÑOS DE HIELO NEVADOS. UNA NOCHE ENTRÓ EN SU SUEÑO EL MOUSTRO MONGOAURELIO, PERO LUCÍA NO TENÍA MIEDO Y LO INVITÓ CON CHUPETINES Y JUGARON AL TA- TE- TI.
TODOS LOS DÍAS VA CORRIENDO A LA CAMA PARA SOÑAR UNA NUEVA AVENTURA.

JULIA PORCEL 3º GRADO ESCUELA Nº 178 VILLA CAÑÁS






SUEÑOS DE CARNAVALES CON SERPENTINA Y PAPEL PICADO

UNA NOCHE CERRÉ LOS OJOS Y ENTRE AL PAÍS DEL NONI NONI.
EMPECÉ A SOÑAR QUE ESTABA EN UN CARNAVAL, DESDE ARRIBA CAÍAN SERPENTINAS DE MIL COLORES Y PAPEL PICADO.
HABÍA MUCHA GENTE ESPERANDO EL SHOW MÁS COLORIDO DE LA ARGENTINA. YO ERA BAILARINA DE LA COMPARSA TENÍA MUCHAS PIEDRAS, PERLAS, BRILLITOS, PLUMAS Y UNA BIKINI DE LENTEJUELAS.
CUANDO DESPERTÉ LE CONTÉ A MIS PADRES EL MARAVILLOSO SUEÑO.

ABIGAIL SANABRIA 3º GRADO ESCUELA Nº 178 VILLA CAÑÁS









MI MEJOR AMIGA

MI MEJOR AMIGA ES JULIA, ES BUENA, SIMPÁTICA Y HERMOSA. ELLA ES ALTA, TIENE LOS OJOS MARRONES Y EL PELO ROJIZO COMO EL DE LA SIRENITA.
NOSOTRAS NOS CONOCIMOS EN EL JARDÍN Nº 29, EMPEZAMOS A JUGAR DESDE LA SALITA DE DOS HASTA TERCER GRADO.
EN EL RECREO JUGAMOS UN MONTÓN. CUANDO VIENE A MI CASA NOS RE DIVERTIMOS, JUGAMOS A ESCRIBIR, A ANDAR EN BICICLETA, A LA MAMÁ, ALA COCINITA Y A LA COMPUTADORA.
JUNTAS LA PASAMOS GENIAL.

KIARA PAZ 3º GRADO ESCUELA Nº178 VILLA CAÑÁS

martes, 10 de agosto de 2010

EL PULPO GOMÓN

“EL PULPO GOMÓN”.



EL FONDO DEL MAR ESTABA DE FIESTA, SE FESTEJABA LA GRADUACIÓN DE PEZ ESPADA. TODO ERA DE GRAN LUJO Y DIVERSIÓN, LOS CORALES ESTABAN MÁS BELLOS QUE NUNCA, UN CORO DE BALLENAS HACIA LA CORTINA MUSICAL, LA OSTRA DOROTEA LUCÍA SU MEJOR PERLA, EJEM!…..BUENO CASI LA MEJOR, PORQUE SE HABÍA DESCASCARADO EN UN COSTADO.
LAS ALGAS ESTABAN MÁS DELGADAS QUE NUNCA, Y LAS MEDUSAS IBAN DE AQUÍ PARA ALLÁ MOSTRANDO SUS TRAJES LLENOS DE TRANSPARENCIAS.
PERO, EN UN RINCONCITO OSCURO, HABÍA ALGUIEN QUE NO SE ESTABA DIVIRTIENDO…ERA EL PULPO GOMÓN, Y SE SENTÍA MUY ABATIDO PORQUE CERCA DE ALLÍ PODÍA VER A DOS ESTRELLAS DE MAR QUE CONVERSABAN Y SE REÍAN, ¡SE REÍAN DE ÉL!
_ ¡JA, JA, JA! ¡ MIRA A ESE GORDINFLÓN! –DIJO UNA DE ELLAS, LA MÁS TEXTURADA.
-PARECE QUE ESTÁ LLENO DE VERRUGAS, ¡QUÉ TIPO TAN PEGAJOSO!-EXCLAMÓ LA OTRA, SEÑALÁNDOLO GROSERAMENTE CON UNA DE SUS PUNTAS.
EL PULPO GOMÓN QUE ERA FEO PERO NO SORDO, QUERÍA HUIR DE ESE LUGAR, PERO PENSÓ…
_”NO PUEDO IRME ANTES DE QUE LA FIESTA TERMINE, PEZ ESPADA ES MI MEJOR AMIGO, NO PUEDO FALLARLE. ESTOY TAN SOLO AQUÍ, Y TODOS SON TAN BELLOS Y TALENTOSOS Y YO TAN…..PARA COLMO MI AMIGO CANGREJO PUSO MARCHA ATRÁS Y SE EQUIVOCÓ DE CAMINO…. ¡NO PODRÁ AYUDARME!
DE PRONTO, SE OYÓ UN GRITO: ERA MAMÁ HIPOCAMPO.
_MI HIJO, CABALLITO DE MAR, ESTÁ ATASCADO BAJO UNA PIEDRA, ¡S.O.S!, ¡S.O.S! ¡QUÉ ALGUIEN ME AYUDEEEEE!
GOMÓN SIN DUDARLO PUSO EN FUNCIONAMIENTO SUS TRES CORAZONES, Y DE UN SOLO INTENTO LLEGÓ DONDE EL PEQUEÑITO. DESPLEGÓ UNO A UNO SUS TENTÁCULOS, CON CINCO DE ELLOS CORRIÓ LA GRAN PIEDRA, MIENTRAS CON OTRO SOSTENÍA AL PEQUEÑÍN, Y CON EL QUE LE SOBRABA CONSOLABA A MAMÁ HIPOCAMPO.

_¡CABALLITO DE MAR ESTÁ FUERA DE PELIGRO!_GRITÓ EL TIBURÓN.

ENTONCES SE ESCUCHÓ UNA GRAN, GRAN APLAUSO.

_¡BRAVO GOMÓN, ERES NUESTRO HÉROE!_ DIJERON TODOS AL UNÍSONO.
Y GOMÓN FUE TAN, TAN FELIZ, QUE NUNCA MÁS SE VIÓ DIFERENTE, Y COMPRENDIÓ QUE LA DIFERENCIA VERDADERA NO ESTÁ EN EL EXTERIOR DE CADA UNO, SINO EN LA GENEROSIDAD DEL ALMA.
AUTOR: C. CRISTALES

Miguel Ángel Turco, nos regala otra de sus geniales obras

Carta a mis amigos los adjetivos.

Amables, abiertos, amplios, accesibles, admirables, atentos, alucinantes, agradables, alegres, asimétricos, afables, amigables, y ambivalentes amigos:
Les escribo esta carta con la sana, saludable y bienintencionada pretensión de escribirles una carta. Les parece poco?
Ustedes me halagan y me humillan con la misma facilidad y ese es un don que no cualquiera posee, acaso los verbos o los sustantivos tienen semejante poder? Yo creo que no, que sólo ustedes son capaces de generar semejante conjunción de extremos. Geométricamente hablando, ángulos opuestos por el vértice. Filosóficamente hablando, mito y logos. Religiosamente hablando, cielo e infierno. Escatológicamente hablando, pis y caca.
Un día yo fui todo eso que les dije a ustedes y además muy absoluto, abstemio, abundante, actualizado, adiestrado, admirable, afianzado, alto, altivo, amoroso, y me sentí tocar el cielo con las uñas. Al otro día, sin embargo, me plantearon que en realidad yo era artero, acondicionado, acéfalo, ambivalente, aventurero, amarrete, anodino, apático, amorfo, atorrante, abrasivo, abstracto, adicto, agarrado, agitador, alcahuete, anarquista, analfabeto, atrevido y analista y además estaba abatido.
Yo respondí diciendo que era bueno, beato, bendito, benemérito, benevolente, brioso, bravo y hasta admití, un poco beligerante, pero insistían en decirme bajo, bestial, burócrata, bagallo, bárbaro, bígamo, blandengue, bizarro, bobo, borracho, bastardo, bruto, burdo, basurero, baboso y boludo.
Con todo esto pensé que debía mantener firme mis convicciones y mostrarme concreto, cauto, caballeroso, compensado, calificado, cálido, cándido, caritativo, competente, confiable, confidente, capaz, y algo canchero. Pero noté que solamente logré mostrarme cabizbajo, caído, celoso, cautivo, castrado, capcioso, caprichoso, cerrado, cetrino, conformista, conservador, cínico, cachivache, calvo y cachondo.
Debí, así dadas las cosas, tomar la decisión de revertir esto y me propuse demostrar que era chistoso, chispeante, cheto, chic, cheronca, y un poco chauvinista y terminé siendo chato, chabacano, cholulo, chambón, charlatán, chismoso, chocante, chungo, chupa medias y chanta.
Casi desesperado, busqué la manera de convertirme en alguien diferente, demostrativo, dado, decente, dulce, delicado, dócil, dialéctico, diestro, diplomático, disciplinado, desopilante, directo, y me devolvieron la sensación de estar dormido, dominado, decadente, duro, desgastado, débil, decrépito, desamparado, descolgado, desdichado, desgraciado, desmedido, desocupado, despectivo, desorientado, desolado, desertor, demagogo, delincuente, demente, deforme, disoluto, depravado y deprimido.
No lo soporté más, de modo tal que decidí renunciar a tanta definición. Que logré? Un estado de eterno etéreo, engrupido, enajenado, embotado, encasillado, enclenque, energúmeno, enrevesado, empírico, envidioso, errante, egoísta y estúpido, siendo que en realidad me hubiera gustado mucho más estar erguido, emocionante, enérgico, efectivo, eficiente, elocuente, estilizado, enterado, entero, educado y encendido.
Para ser franco, frágil, famoso, fuerte y feliz, me siento demasiado frío, frustrado, famélico, furibundo y fofo y para ser guapo, grande, galán y gallardo, estoy un poco garbo, garzo, ganso y grosero.
Pues por eso les escribo, me da por momentos la sensación de ponerme harto, hermafrodita, hierático, pero en realidad quiero ser hábil, heterosexual, e hilarante con ustedes.
Espero sepan entenderme, ya que no me gustaría que piensen que estoy siendo idiota, impredecible, impulsivo, incauto, ilógico, inoportuno, imprudente, incapaz, improcedente, incoherente, inocente e ilícito, siendo que lo que busco es darles la impresión de estar indemne, ilustre, incisivo, ínclito, incólume e inconsciente.
Tenía, y tengo, la necesidad de decirles que entiendo la jactancia de creerme jovial, joven, justo, una joyita, aunque ustedes presuman que por esto, yo estuviera siendo juez, justiciero, jurídico, jodón y jumento.
Lo que no se si entiendo mucho es el hecho de que si soy capaz de mostrarme lato, locuaz, laudable, libre, luminoso y laxo, por qué sólo me pueden ver de forma que aparezco como lesivo, loco, lelo, lento, lerdo, y libertino.
Tal vez sea mi incapacidad para aprender y mantenerme siempre muy modesto, maleable, maduro, magnético, mártir, mayúsculo y mesurado, lo que me hace parecer malo, mezquino, matón, matrero, mendigo, místico, malandra y mentiroso.
De todas formas sostengo que mis intenciones son nobles, netas, naturales, necesarias, normales y hasta nostálgicas, aunque parezcan negativas, nefastas, naufragas, neurasténicas y nocivas.
Les parece una ñoñería? Tal vez sea bastante ñoño, si, lo asumo.
Pero no quiero que se asusten, tampoco pretendo con esto ser opositor, omnipotente, orgulloso, ocurrente, observador, odioso, oculto, ocioso, obsesivo, obsoleto, oficioso, ofuscado, oligarca, opaco, y que esto les resulte oneroso, opaco y olvidable.
Pasa, que me gustaría saber que piensan ustedes, cuando uno se enfrenta a la posibilidad de ser evaluado como pecador, paria, pusilánime, perdedor, palurdo, pamplinero, parco, pasivo, pesado, payo, parlanchín, paquidermo, perezoso, polémico, petulante y pedante cuando uno se ve a sí mismo como positivo, pautado, pacífico, paladín, palmario, pensante, perseverante, pícaro, pintón y peculiar.
No es que esté quebrado, quejoso, sea un queso, o pretenda tener una actitud quijotesca, pero tampoco me puedo quedar quieto, y no sentirme quisquilloso.
Por eso recurro a ustedes y sigo pretendiendo que me expliquen cómo se puede ser o estar reflexivo, radiante, rápido, raudo, recatado, rebosante, recto, reconocido, refinado, regente, rehabilitado, responsable, resuelto, risueño, robusto, romántico, relajado, renovado, relevante y rendidor, y que del otro lado lo vean a uno como renegado, radical, rayado, ríspido, reacio, rebelde, recalcitrante, recluso, recóndito, relegado, repugnante, resignado, retirado, retrógrado, retórico, retraído, reventado, revestido, rígido, ridículo, riguroso, rimbombante, rezongón, roñoso, rudo, rústico y rugoso.
A veces siento pena por mi mismo, lo asumo, porque no se qué pensar ya, si es verdad, como me dicen a veces, que soy sincero, sociable, sencillo, simpático, solidario, simple, solícito, sabio, sacrificado, sacro, saliente, saludable, salvo, santo, satisfecho, sexuado, sensual, sensato, seguro, selecto, semental, sereno, servicial, sesudo, significante, sinóptico, sistemático, soberano, sobrio, solemne, solvente, soñador, sorprendente, sublime, suculento, suficiente, sugestivo, superior y sustentable, o como tantas otras veces, me infieren de sabandija, sacrílego, salvaje, sarcástico, satánico, seco, secuaz, sediento, senil, sinuoso, sirviente, soberbio, socarrón, sádico, solitario, soplón, sordomudo, sucio, superficial, somero, supersticioso y subyacente.
Yo quiero pensar que no es mi culpa, que hay cosas que no puedo controlar y gobernar aunque partan de mi propio interior, porque me he dado cuenta que, por ejemplo, siendo tierno, tenue, trabajador, terso, talentoso, tenaz, tesonero, tímido, trascendental, transparente, tradicional y travieso, termino haciendo tantas tonterías como cuando soy tonto, traidor, timado, trasgresor, terco, tarambana, tenebroso, tramposo, tramoyero, traslúcido, trasnochado, tremendo, triste, y turbado.
Claro, tal vez yo piense todo esto porque soy único, unívoco, útil y utópico, por más que me quieran hacer creer que soy usurero, usurpante, umbrío, ultrajador, utilitario y urticante.
Seamos honestos, no me pueden negar que yo traté siempre de ser valiente, vasto, valeroso, válido, venerable, verdadero, veraz, vergonzoso, verídico, versátil, vertiginoso, vibrante, vigilante, viril, virtuoso, vistoso, vital, vivaz, vocacional, voluntarioso y vanguardista. Les juro que eso he intentado, aunque me digan que sólo he logrado ser vacilante, vacuo, vacío, vago, vándalo, variable, venenoso, vengativo, ventajero, verborrágico, veterano, vicioso, viejo, vil, violento, viperino, vividor, y vulgar.
Si al menos yo notara y asumiera que escribo mal, inadecuadamente, aceptaría también que puedo ser wuaso, wuarro, wuacho y webón, más aún si me pongo medio whiskero. Hasta puedo aceptar que a veces soy bastante xenofóbico y si hay hambre no me asusta convertirme en xilófago.
No quiero yacer yermo, yerto, yuxtapuesto a mis propios deseos, ni sonar yeísta, y yoísta.
Para zafar puedo hacer un esfuerzo y demostrarles a todos que puedo ser zigzagueante pero no zoofílico, zozobrante pero no zoomorfo, zaguero pero no zocato.

En fin, como verán hasta el idioma me juega una mala pasada, porque si pretendiera que no me califiquen, hay tanto de donde asirse que la tentación parece irresistible, por lo tanto, abdico a ser evaluado, calificado y adjetivizado, pero con la sana y firme convicción de pretender que al menos reconozcan que antes, deben conocerme un poco más. Y esto va a favor de ustedes, porque cuanto más me conozcan, más posibilidades tendrán en acertar que yo soy todo eso junto, en uno solo, como ustedes, como todos, y que no importa cuantas definiciones se les ocurra, cuantas calificaciones crean que merezco, siempre habrá un nuevo adjetivo esperando para hacerles el viejo truco del espejismo, ese truco en donde lo que uno ve, no siempre es lo que parece que uno ve.
Uno es un sujeto, por eso es subjetivo, distinto sería si uno fuera un objeto, allí podría ser uno objetivo, y se me ocurre que ustedes pueden apenas, sin ser sujetos, ser livianamente subjetivos, por lo que ni siquiera podrían tener esa excusa.
Reciban de mi esta humilde, modesta, acotada y reflexiva sugerencia. Antes de andar ufanándose de sus riquezas y variedades, traten de conocer un poco más a quienes se dirigen, ya que no creo que a ustedes les guste que uno ande diciendo por ahí que ustedes mismos son arrogantes, irreverentes, caprichosos, autoritarios, mezquinos, obtusos, contradictorios y otras yerbas por el estilo siendo que pueden ser muy útiles, solícitos, eficaces y necesarios.
Yo espero encontrarlos de vez en cuando, pero no abusarme de ustedes, hagan posible entonces que ustedes no se abusen de mi.

Un cálido, afectuoso, sincero, vertiginoso, amable, estrecho, sentido y fraternal abrazo.

Saludos a sus primos, los pronombres.

Carta al silencio.

Estimado señor silencio:
Hace tiempo ya que pretendo escribirle esta carta, pero recién ahora he tomado coraje y la decisión de escribirle.
Mi temor ha radicado en el hecho de no estar completamente seguro acerca de lo que he de decirle. O mejor dicho, de qué forma se lo he de decir. Lo admiro, pero también le temo, no escribirle sería quedarme en silencio, y gozar de su beneplácito, escribirle, sería manifestarme, no callarme, y gozar de mi propio beneplácito a riesgo de provocar su ira.
De todos modos y reflexionando al respecto, he llegado a la conclusión de que muy probablemente jamás estaré del todo seguro con respeto a lo que tengo que decirle y de la forma en que puedo decirlo, por lo que, y en definitiva, y coherente con las actitudes que he resuelto tener en esta etapa de mi vida, ya carecería de todo sentido no escribirle.
Mis temores se inician ante la duda conmovedora de no saber si en realidad usted es bueno o es malo, si de verdad es tan valioso como algunos dicen o en realidad es una formidable excusa para no involucrarse, para no correr riesgos.
He pensado que tal vez, no sea ni bueno ni malo y que sus efectos pueden ser benevolentes o letales según la oportunidad y la circunstancia.
Usted debe advertir que es sumamente dificultoso poder encontrar definiciones correctas y precisas a la hora de definirlo. También lo es determinar si sus alcances producen beneficios enormes, apenas algún beneficio, ningún beneficio, alguna pérdida leve, una pérdida importante o el más traumático y mortífero de los flagelos.
Me he dado en pensar que tal vez usted pueda ser comparado con la oscuridad. La oscuridad es ausencia, ausencia de luz, y usted parece ser ausencia, ausencia de sonidos. La luz anula la oscuridad sin combatirla y el ruido lo anula a usted sin entrar en batalla.
Al igual que ella, usted es necesario y prescindible al mismo tiempo. Reconozco y admito también que a veces su presencia es imprescindible, irremplazable, y muchas veces he considerado que su advenimiento es urgente.
Otras veces en cambio he notado que cuando usted llega se produce un efecto mutilante, una especie de anestesia que avanza por el organismo hasta invadirlo completamente.
Con usted, muchas veces, se han perdido ideas brillantes, comentarios agudos, se han desvanecido verdades, críticas edificantes y superadoras y tras su figura se han escondido personajes siniestros, como la indiferencia, por ejemplo, que a veces adivino su aliada y la puedo observar complacida con su presencia.
Muy pocas veces, en cambio, he notado que usted tenga el nunca bien ponderado sentido de la oportunidad, es decir, aparecer cuando es necesario e irse en cuanto comienza a ser pernicioso y petulante.
Lo que me hace desconfiar es que usted ha sido alabado e idolatrado, enaltecido y glorificado tantas veces como ha sido defenestrado y maltratado, humillado y desvalorizado. Y es en definitiva este andar en extremos tan distantes lo que me hace presumir en usted una falta de equilibrio.
Usted ha atendido las necesidades de sabios, de gente pensante y productiva con la misma facilidad que acude a saciar ansias de personas huecas, chatas, mediocres y aburridas, sin perjuicio de haberlo sorprendido en maleantes, mentirosos, abusadores y timadores, falsos mensajeros de un mensaje que no existe.
Me consta haberle visto hacer grandes obras de bien y poco después destruir el fruto de enormes y nobles esfuerzos. Congratularse con el popular y justo reclamo y poco después hacerse vocero de intereses mezquinos e impíos, ser representante de pobrezas y miserias y al mismo tiempo disfrutar de los beneficios de las riquezas mal habidas.
Quién es usted en definitiva?
He pensado que tal vez tengan razón los que aseguran que no es usted el responsable ni de unas ni de otras cosas que acaecen con su presencia, sino el uso que de usted hacen los que se han dado cuenta de su existencia y aprovechan para sacarle provecho ya sea manteniéndolo sano y fuerte, ya sea rompiéndolo para que usted no sea el protagonista que les prive de sus reclamos, y a la vez de sus mentiras.
Como un lobo disfrazado de cordero que a veces se convierte en un cordero disfrazado de lobo, usted interfiere en toda cosa que uno quiera imaginar, y es sorprendente que hasta quienes más dicen conocerlo nunca están seguros de llamarlo para que acuda en su ayuda o espantarlo para que ayude no estando.
Usted a veces se presenta y otorga, pero tantas veces también aparece y desafía, niega, contesta, hace más ruido que el ruido mismo, se enoja, reclama, exige, critica, da batalla, vence y se rinde, se deja ganar, se deja perder...
Yo sigo sin atinar a definirlo, ni siquiera me atrevo a un juicio selectivo, una ponderación apenas subjetiva y caprichosa, ni a un concepto elaborado y objetivo.
Usted me provoca admiración y miedo, calor y frío, paz, calma y angustia y desesperanza.
Cómo poder definirlo si ni siquiera puedo definir lo que me pasa ante su magna e intolerable presencia y ante su intolerable y magna ausencia?
Quisiera saber primero qué sucede conmigo y no puedo descubrirlo, porque cuando alcanzo un atisbo de la idea que se me hace en la conciencia, aparece su otro costado y la derriba. Derriba esa idea y genera otra casi opuesta, y las dos intuyo, relativas.
Han pretendido algunos, ayudarme a definirlo, pero tampoco he quedado del todo conforme con los logros compartidos. Algunos de esos algunos me han dicho que usted es necesario cuando no hay ningún mejor ruido, que aporte algo mejor que lo que usted acarrea.
Otros algunos de esos algunos, me han afirmado que usted nunca tendrá el valor de aceptar que sólo es un efecto nefasto de la falta de argumento.
Por ahora no quiero atribularlo con más comentarios, tal vez en un futuro no muy lejano vuelva a incomodarlo tratando de llegar a usted para saciar mi deseo de conocerlo y saber, al fin de quién se trata.
Por lo tanto, me despido con amable cortesía, y mis respetos. Usted merece el beneficio de la duda, y hasta que demuestre lo contrario, es inocente, como lo somos todos cuando aún nadie ha demostrado nuestra culpa y no hay una duda razonable de haber sido responsable del acto cometido...

Un admirador confundido.

Autor: Miguel Ángel Turco

DOLOR DE MADRUGADA de NÉLIDA PUIG (Poeta Argentina)

Duerme en la estación,
de almohada un pantalón
gastado, de tanta calle...
Y sueña con un oso de peluche
que lo abraza, aunque no escuche
su dolor de madrugada,
cuando el hambre se apodera del silencio
y hasta el sol que está naciendo lo condena a despertar.

Se lava los ojos con agua de un charco
que el último llanto tiñó de marrón...
Se mira las manos ardidas de dudas
buscando respuestas que nadie le dio.

La lenta persiana del bar de la esquina
Bosteza y su aliento a noche y alcohol
le pega en la cara de pedir en rezo,
las dos medialunas del día anterior...

Espanta a un gorrión que desayuna
las migas de ese pan que le negamos,
bajando de a peldaño, resignado
a otro día sin caricias, que lo empieza a bofetear.

Se anuda el corazón, se trepa al primer tren
sin ganas, sin destino ni equipaje...
Y en ese balanceo de ida y vuelta
va contando las sortijas que jamás pudo sacar...

Monedas que aturden su infancia de lata
son sobras de tantas vergüenzas que ve
lamerse la culpa, palmearse la espalda,
lustrarse la aureola de hombre de bien.

Cargando su sueño de niño mimado,
que juega, que estudia, que come (también),
que tiene una vieja que le hace cuidados
y un viejo que “pira” por verlo crecer...

Vuelve a la estación,
desploma su ilusión
cansado de tanta calle...
Y sueña con un oso de peluche
que lo abraza, aunque no escuche
su dolor de madrugada,
al primer derechazo del que juna
desde arriba o de costado, con los ojos apurados
en no ver, para olvidar.

Nélida Puig
(Poeta Argentina que nos honra
todos los sábados con sus letras
en los ENCUENTROS de ARTE COOPERATIVO "LOS ESCRIBAS")

Recopilación: MJS / AWZ -Los escribas

jueves, 5 de agosto de 2010

TALLER DE ESCRITURA

Modalidad: virtual
Duración: 3 meses
Comienzo del taller: 15/08/10
Objetivo: Proveer a los participantes de herramientas e información necesaria para poder producir textos propios.
Costo del taller: $ 150 (pueden abonarse en 3 cuotas mensuales de $ 50 c/u)
Servicios ofrecidos:
• Material teórico
• Propuestas de escritura y elaboración de textos
• Corrección de los textos producidos
• Publicación de los textos en: http://escribaslosescribas.blogspot.com
• Información sobre concursos literarios
Para ingresar al curso yu recibir más información:
E – mail: losescribas@hotmail.com

lunes, 2 de agosto de 2010

Cuento cooperativo

CONTINUAMOS PROPONIENDO TRABAJOS GRUPALES, DONDE EL APORTE DE CADA UNO, ES UN PELDAÑO MÁS DE ESTA GRAN ESCALERA…
QUIEN SE ANIMA A COMPARTIR UN PEDACITO MÁS DE ESTE CUENTO???

El duende soñaba con la hermosísima Juli, que nunca advertía su presencia. (Los Escribas)

¿De qué mágicos artilugios se valdría para conseguir aunque sea una sonrisa. o solo una mirada de sus bellos ojos azules como el mar...? (Claudia Vazquez Gaite)

¡¡¡Debía pensar en alguna travesura, a la vez cuidar que la bella Juli no se espante de susto!!!! Cómo y dónde utilizar su energía, tal vez en colorido jardín detrás de la casa.... (Mariela Uribe)

A la mañana siguiente, aprovechando los primeros rayitos de sol, el duendecito enamorado se sentó a meditar, entre flores y animalitos... (Melina Jaureguizahar Serra)

Debia pensar y hacerlo rapidito, no fuera que el valeroso principe apareciera otra vez para arruinar sus planes... Y no es que el no creyera que el no mereciera a la hermosisima Juli, pero su corazoncito le decia otra cosa. (Claudia Vazquez Gaite)

Entonces aprovechando la sabiduría y el carisma de las flores de su jardín les pidió ayuda... la rosa le dio el don de la belleza, la margarita el don de la alegría el olivo la paciencia, los jazmines su aroma embriagador y así uno a uno fueron colmando colmando de virtudes a el duendecillo que lleno... del amor de los geranios fue por su bella Juli.... (A puente arte)

Primero su emoción era tan grande que corrió desesperado hasta donde estaba su amor... pero a medida que llegaba a la casa de Juli, el miedo lo alcanzó y no supo si eso que hacía era lo correcto. Por suerte, en el camino, la mariposa Sosa lo encontró y lo animó. Así, nuestro duendecito siguió camino... (Melina J)

Llego casi sin aliento pero llenisimo de amor. Cuando vio a Juli,tan hermosa,y sintiendo cosquiillitas en la panza, casi se cae redondo! Pero estaba decidido, junto fuerzas y le confeso que estaba enamorado...(Claudia Vazquez Gaite)

La hermosa Juli lo miro a los ojos, como solo miran los enamorados y le dio el mejor regalo, su primer beso de amor.(Claudia Vazquez Gaite)